Es ese extraño ruido el que me come todos los días la cabeza, el que me relaja en mis peores momentos, y el que me alegra en los mejores. Ese ruido que hace que enloquezca por dentro y saltar por fuera, el único que se que nunca me va a traicinar, que siempre va a estar ahí cuando lo necesite. Por que no es nada material, ni físico, me para mi tiene un sentimiento especial, un sentimiento que nunca había sentido por nada ni por nadie. La verdad esque le tengo que agradecer muchas cosas, porque gracias a ella he pasado super buenos momentos y lo mejor a sido que nunca los había pasado malos, que me ha levantado el ánimo y siempre me ha protegido. Protegido de la realidad, esa que muchas veces tanto daño me hace. Porque gracias a ella se de verdad sentir, y querer, esa pequeñas palabras con ritmo las que muchas veces me hacen vivir la vida diferente, extraña, de alguna manera. GRACIAS.